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EL INGENIERO DEL AGUA

Enrique Otero Benet. Vicedecano del Colegio de Ingenieros de Caminos de Andalucía. Presidente de Construcciones Otero, quienes lo conocen lo definen como honesto, trabajador y familiar


+ Lee el artículo en pdf publicado en el periódico IDEAL de Granada el Sábado 5 de Mayo de 2018 [Aquí]


Un viaje que hizo con su padre a Córdoba y el puente que le enseñó, que había construido la empresa familiar, lo recuerda aún con mucho cariño y como una imagen que le marcó. Enrique Otero Benet (Tortosa, Tarragona, 24 de abril de 1971) ha sido elegido vicedecano de la Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos. El también presidente de la empresa Construcciones Otero se siente granadino porque, aunque nació en el norte de España por cuestiones familiares, pronto se instaló en la capital granadina.

La familia es lo principal para este ingeniero, al que sus conocidos definen como un trabajador incansable. Su vida está marcada desde pequeño por ese círculo que formaron sus padres, José Enrique Otero Galiana y M. Carmen Benet Ollés, así como su abuelo Eligio Otero Peleteiro, que fue quien fundó en 1956 la empresa. Enrique Otero tuvo en esos primeros años de vida tres compañero de excursiones a las obras de la constructora familiar, que fueron sus hermanos Eligio, Jorge y Carmen. Es el tercero de los cuatro y los tres primeros se llevan entre sí meses.

En la empresa familiar han trabajado todos ellos, también primos, tíos… Aprendieron a querer lo que hacía su familia desde muy pequeños. Cuando tuvieron edad para trabajar, algún verano que otro estuvieron a pie de obra. Como anécdota, algunos familiares recuerdan que siendo su abuelo ya mayor los ponía a hacer algo en alguna obra y no había quien lo siguiera.

El nuevo vicedecano del Colegio de Ingenieros de Caminos, que aglutina a unos 3.500 socios, estudió la carrera en la Universidad de Granada. Años después (2007-2008) hizo máster en Dirección Empresarial y Marketing: Executive MBA (EMBA) de ESIC, cursado en la Escuela Internacional de Gerencia. Después ha seguido formándose en diferentes cursos. Antes de todo eso, la EGB la cursó en el Colegio Sierra Elvira y el BUP-COU en el Instituto de Bachillerato Alhambra.

Luis Moral, elegido decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, lo conoció en una obra de Sevilla hace poco más de medio año. Cuando decidió dar el paso a presentarse al decanato lo llamó. «Enrique es una persona honesta, lo que se le propone siempre lo cumple, es muy riguroso y se entrega a su trabajo con muchas ideas positivas», destaca Moral de un ingeniero al que siempre le ha gustado la infraestructura hidráulica, «pero ha sabido adaptarse a las exigencias del mercado». Estas referencias las hace Moral al comentar que Construcciones Otero es «una empresa modélicas que ha sabido, durante la crisis, dar respuestas a la situación que había y hacer obras de toda índole.

Primero, en Sevilla

Enrique Otero, antes de trabajar en la empresa familiar, estuvo en ITSMO 94, una empresa de ingeniería ubicada en Sevilla, especializada en tecnología del agua. Allí realizó varios trabajos en diferentes provincias andaluzas. Su sello está en varias depuradoras y colectores. El día 1 de julio de 1999 se incorporó a Construcciones Otero como jefe de obra. Entonces estaba al frente de la constructora su padre. En 2003 posó a ser jefe de grupo de obras y también dirigió el departamento de contratación y la oficina técnica. En 2006 pasó a ser gerente y en 2013, tras la jubilación de su padre, pasó a presidir la organización. De todos estos años, en su currículum figuran intervenciones hidráulicas, civiles, mantenimiento… en varias provincias andaluzas y también en otros países. En 2011 se creó la filial marroquí de Construcciones Otero, Otero I&C especializada en tecnología del agua, que ha acometido ya varios proyectos. Se han ido adaptando al mercado, como le gusta repetir.

Son muchas las infraestructuras levantadas, pero Enrique Otero, que está casado con Olivia Martín, estará muy orgulloso de contarle a su hijo Mario, que ahora tiene tres años, y a su hija Marta, de tan solo seis meses, que la empresa familiar llevó a cabo las obras de pavimentación del Patio de los Leones en La Alhambra para el Patronato de la Alhambra. Sabe que con esa intervención, Construcciones Otero ha entrado en la historia de Granada para siempre. Ese negocio que puso en marcha Eligio Otero y que hizo obras en media España -allá donde había una intervención iba la familia- estará ligada para siempre al monumento más visitado de España. La primera actuación en Granada fue en Motril y Salobreña en regadíos en el año 1938.

La innovación y sostenibilidad son su carta de presentación en el trabajo. En su tiempo libre, que no es mucho, no duda en decir que lo que más le gusta es estar con la familia. Dicen, quienes lo conocen, que es un padrazo.
En Construcciones Otero ahora trabaja con su hermano Jorge y otros familiares. El número de empleados ronda los 150 y a Enrique Otero, siempre que tiene oportunidad le gusta destacar el trabajo del equipo. Cuentan que esas inquietudes relacionadas con la innovación y la sostenibilidad les han llevado a participar activamente en el Clúster de Construcción Sostenible de Andalucía, cuyo principal objetivo es el cambio de paradigma en la construcción, hacia un modelo sostenible.

Asimismo Construcciones Otero viene promoviendo, desde hace ya muchos años, una cultura de I+D+i, habiéndose implicado en diversos proyectos con diferentes instituciones tanto públicas como privadas. Actualmente participan en el desarrollo de una instrucción para el Proyecto, Construcción y Explotación de Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible junto a Emasagra y en el proyecto LIFE Ecogranularwater junto a la Universidad de Granada, la Diputación de Granada, y la Universidad de Aalto (Finlandia), en el cual se persigue la eliminación de contaminantes (principalmente nitratos) por ala biológica.