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DEMARCACIÓN DE ANDALUCÍA, CEUTA Y MELILLA DEL CICCP

El responsable de Infraestructuras del Transporte de la Junta de Andalucía anuncia la puesta en marcha del Fondo Social para el Clima de la UE que traerá 86.700 millones para garantizar una transición energética justa a través del apoyo a los más afectados por la pobreza energética, y de los que una parte se destinará a inversión en infraestructuras que atiendan la “pobreza en el transporte”

La “movilidad sostenible” alentada por las directrices europeas marca las líneas de acción de la Junta de Andalucía en el área del transporte. Un derecho social en el que están volcados en Andalucía, como desgranó con su planificación de actuaciones el director general de Infraestructuras del Transporte de la Junta de Andalucía, Eduardo Gutiérrez García, ante unos sesenta compañeros en el Encuentro Colegial de la Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla del CICCP, convocado el 14 de mayo por el Representante en Sevilla, Pietro Tucci.

Los Fondos Feder (2021-2027) han supuesto un impulso en los últimos años para infraestructuras fundamentales y necesarias en Andalucía en este camino hacia la movilidad sostenible, como los Corredores Ferroviarios de la Red Transeuropea de Transporte (Objetivo 3. Una Europa más conectada), y más a nivel local, como en Sevilla con la inversión en las nuevas líneas del Metro o el tranvía de Alcalá (Objetivo 2. Una Europa más verde y baja en carbono). El 80% de estos fondos, según indicó Gutiérrez García, se han destinado a transporte limpio y el resto para carreteras. “En un corto plazo”, anunció, la Unión Europea pondrá en marcha el Fondo Social para el Clima de la Unión Europea –con el objetivo de garantizar una transición energética justa a través del apoyo a los más afectados por la pobreza energética y en el transporte-, que traerá 86.700 millones de euros entre 2026 y 2032, “de los que una parte irá para inversión en infraestructuras”.

El reto está en ofrecer alternativas para reducir parámetros actuales significativos como que el 75% de las emisiones de GEI (Gases Efecto Invernadero) provengan del vehículo privado, o que el 13% del gasto de los hogares–que significa más del 10% de sus ingresos netos- deba destinarse a transporte. El hecho de que casi el 60% de la población andaluza resida en las áreas metropolitanas, indicó el director general de Infraestructuras del Transporte, presenta una realidad a afrontar en la planificación, con la sostenibilidad y el equilibrio social como meta. “Pero las infraestructuras deben ser rentables, tanto a nivel financiero como social”, apostilló. De ahí que pusiera el foco no sólo en construir nuevas infraestructuras sino en “optimizar lo que ya tenemos”, dar más servicio y elevar la respuesta a la demanda con la red y el sistema que se posee actualmente. Este está siendo uno de sus principales campos de trabajo, avanzando en la digitalización del transporte, favoreciendo la intermodalidad, promoviendo la implantación de soluciones innovadoras en movilidad y mejorando la “experiencia del usuario”. Citó en este punto el PITMA (Plan de Infraestructuras de Transporte y Movilidad de Andalucía PITMA 2030) como herramienta de instrumentación, la actualización de los Planes de Transporte Metropolitano y la aprobación de los Planes de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS).

Sevilla y su área metropolitana

Gutiérrez García se centró en el análisis pormenorizado de Sevilla, con casi 168 millones de desplazamientos en vehículo privado al año entre la capital y el AM, 83 millones de pasajeros en TUSSAM y 13’5 millones en autobuses metropolitanos, 22’6 millones de viajeros del Metro y 3’5 del metrocentro y 8’6 millones de pasajeros de Cercanías. En este mapa insistió en “gestionar mejor lo que tenemos” y repensar lo planificado.

El director general de Infraestructuras del Transporte de la Junta de Andalucía también detalló las infraestructuras en construcción y justificó las decisiones sobre la priorización de tramos en las distintas líneas del Metro en función de la demanda, que tiene en este momento tres tramos de la línea 3-Norte en ejecución (que comprende desde Pino Montano hasta Prado de San Sebastián). En cuanto a la Línea 3 Sur, entre El Prado y Bermejales, indicó que se estudian varias alternativas de trazado y una prolongación a Palmas Altas y Bellavista para atender las nuevas demandas de Sevilla. “Lo lógico es que este trazado sur espere para iniciarse a que esté terminado el del norte”, aclaró. Está en marcha también el estudio de alternativas de la Línea 2 del Metro de Sevilla, que contempla el trazado original entre Sevilla Este y Torre Triana, y su prolongación a la comarca del Aljarafe, “con el deseo de ser más ambiciosos, pero buscando sinergias con el tranvibús –que irá de Santa Justa hasta Torreblanca-”.

Citó también el tranvía de Alcalá, que espera captar dos millones de viajeros el primer año, anunció; las plataformas reservadas en construcción Sevilla-Salteras (desde la Plaza de Armas hasta Castilleja de Guzmán), y la A-8057 (entre Mairena del Aljarafe y San Juan de Aznalfarache), que concentrarán más de 20.000 traslados diarios cada una. Puso sobre la mesa las alternativas de conexión entre Santa Justa y el aeropuerto, siendo la alternativa escogida la ferroviaria, para dar cumplimiento a la modificación normativa en 2024 de la Red Transeuropea de Transporte de la UE. Por último, trajo al debate también la estación de autobuses de Plaza de Armas, con seis millones de viajeros al año. Ante este panorama preguntó a los presentes qué harían ellos para lograr una movilidad sostenible.

 
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